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Viaje de Estudios

Habia sido un dia agotador y estaba en la baniera descansando. Aun se oia ajetreo en la habitacion, pero pronto todos se irian a conocer la vida nocturna de la ciudad. En el viaje de estudios aparte de que no existe el cansancio, la vida rutinaria parece algo demasiado lejano para ser verdad. En el baño de la habitacion estaba una de las pocas personas que notaban el cansancio en toda su plenitud unido a un vacio en los bolsillos. Estaba en un baño calido y relajante de espuma, pensando en aquella chica a la que habia observado durante todo el dia, que estaria preparandose para que la disfrutase la fria ciudad y los curiosos ojos de todo aquel que la rodeaba. Y es que ella llamaba la atencion alli donde estuviera, por su encanto y su viveza, por sus preciosas piernas y su sonrisa, por su... -Puedo entrar?, es urgente, solo sera un momento! Era ella, su voz resonaba a traves de la puerta. Creia ver como la espuma se balanceaba con el acelerado ritmo de su corazon. Sus pulmones soltaron un soplo que se ahogaba con las mariposas del estomago. -Esta abierto... El pomo giro y ella entro como un vendaval sin mirar a la bañera. Comenzo a hablar apresuradamente mientras buscaba en su neceser. -...perdona pero es que tenia que tomarme la pildora, aunque no se para que pero como tiene que ser todos los dias pues...ay! un baño de espuma, que envidia !... Mientras hablaba salian las palabras como una brisa constante, atropellada pero melodiosa. Sus voluptuosos labios se movian rapidamente y ella humedecia sus labios en las pocas pausas que concedia a su discurso. -...es que solo te falta un porro y estas como Dios... pero que envidia... En un momento penso que era lo que hacia alli ella, cuando todos estaban saliendo del hotel, quizas tenia una oportunidad, no se podia desaprovechar algo asi, deberia arriesgarlo todo. -Y tu? no sales?, porque estaba pensando en hacerme un porro, si te quedas lo pongo cargadito... Ella se quedo callada por un instante y en la bañera se podia sentir la tension. Penso que se habia arriesgado mucho, que solo con una pregunta valdria, que no tenia que haber mostrado esa desesperacion por su compagnia. Era un segundo precioso y ella rompio el silencio. -No, no pensaba salir... El cielo se habia abierto, solo un "si" mas y todo podria ser precioso. -...porque entre que no tengo ya muchas pelas y que estoy cansada pensaba irme a mi habitacion pero con lo del cambio de las maletas con el neceser... y ademas, si tu te quedas... Era algo directo, no era si el guapito de clase se quedaba, no era por aquella persona hundida en la bañera. Si lograba convencerla para eso, se creia con fuerzas para todo. Algo de seduccion en el cuarto de baño no podia ser del todo malo, pensaba. -Podrias hacer tu el porro porque asi a mi no se me moja... Ella miro al agua, aun quedaba mucha espuma y el agua seguia tibia, no habia nadie ya en la habitacion. Ella entorno la mirada y sonrio de aquella forma tan coqueta y picara al mismo tiempo. Entreabrio los labios, susurrando... -Me hago el porro si me dejas meterme en la bañera contigo. El estomago le dio un vuelco y noto como un calambre le recorrio la entrepierna. - Yo! yo, no, no, a mi no me molesta, digo que no, que si quieres comparto la bañera contigo, vaya si a ti no te importa... Tenia que decir que no, que le daba igual, que se meteria en la bañera, tenia que decirlo. -Tengo yo costo y papel. El agua parecia mas tibia, el aire parecia mas suave, era como si sus fantasias se fuesen a cumplir, increible pero cierto. Ademas no habia cosa que mas le gustase observar que a una mujer, y mas a esa mujer tan hermosa, hacerse un porro. Estaba apoyada en el labavo y tenia las piernas cruzadas, esas piernas suaves, doradas, eroticas. Movia los dedos con destreza, mientras imaginaba lo que podrian hacer esas manos, de dedos largos y delgados. Su silueta se marcaba a contraluz con el fluorescente blanco del labavo. De vez en vez miraba a la bañera y sonreia. No veia el momento de que aquella deseada muchacha entrase desnuda a la bañera. Podria sentir sus piernas, su vientre, incluso era posible llegar a su pubis. - No quieres? Despierta... Sin darse cuenta habia acabado y ofrecia el cilindro. Se habia quedado como en una nube mirandola, se podia haber dado cuenta, que pensaria. Mientras fumaba ella se desabrocho el pantalon corto y lo tiro a la esquina del cuarto con un movimiento de pie. Se quito los calcetines primero, dejando ver sus diminutos dedos de los pies. Los estiro como desperezandolos. Se deabrocho el sujetador con la camiseta puesta y lo saco por una manga. Era azul marino y desde la bañera se podia sentir casi el calor de aquella prenda. Deslizo las bragas y las dejo caer hasta sus tobillos. Estaba en un estado de excitacion extranio por ser tan solo provocado por un espectaculo espontaneo que desembocaba en el desnudo. Miro hacia la bañera y sonrio, como si se sorprendiese de que la perfeccion de su cuerpo fuese objeto de aquella mirada. -No me mires asi, que ya sabes como es un cuerpo asi, no? Con ambas manos sujetando el borde de la camiseta con los brazos cruzados por debajo del pecho comenzo a subir la prenda por las caderas. Mirandose en el espejo dejo su trasero redondo, respingon, liso y firme al descubierto. Mas arriba comenzaba la espalda recta con una curva suave en las caderas y en un momento una cascada de rizos morenos cayo hasta la mitad de la espalda. Se dio la vuelta encogiendose como para taparse. -Me dejas un hueco? Se encogio en la bañera y dejo que ella entrase en su zona, para que una vez alli pudiera saltar sobre su presa para hacerla suya. Sentia una extrania dulzura en el agua al saber que el agua la compartia con ella. Entrecruzaron sus piernas mientras ella seguia hablando sobre aquel pais extranjero. Con los talones se rozaban el final de la espalda. Ella tenia el cuello echado hacia atras, ese cuello blanco y largo. El humo salia de entre sus labios cruzado con palabras melodiosas. Paso unos minutos escuchandola, oyendo cada palabra para formar con esos sonidos las frases que tanto anhelaba oir. Sus firmes pechos emergian por momentos de entre la espuma dejando al descubierto un pezon sonrosado y encogido por el contraste del agua y la temperatura del baño. Cada detalle era un mundo en aquel cuerpo, en aquella chica tan perfecta y meticulosamente creada con pequenios pedazos de cielo. Sus ojos se clavaban en el techo y dejaban ver aquel color verdoso que evocaba lagos tranquilos de profundas aguas. Cuando sonreia a mitad de discurso miraba a los ojos ausentes que tenia frente a si y el verde de esas aguas chispeaban divertidos. Habian pasado varios minutos y la piel comenzaba a arrugarse, pero solo ella estaba lo suficientemente consciente como para percatarse del detalle. -Deberiamos salir, parece que te duermes y yo empiezo a arrugarme... -Si, si,, vamos afuera, hay un par de toallas por aqui. Ella permanecio quieta como para ser la ultima en dejar su cuerpo desnudo al descubierto, ya que casi lo habia hecho antes. Ella observo como salia de la bañera como escondiendose por miedo a mostrarse. Alargo la mano ofreciendola la segunda toalla y salio de la habitacion. Ella recogio su ropa y se puso solo la camiseta. Al salir estaba la toalla sobre la cama y miro hacia el cuerpo desnudo sentado en el suelo. Comenzo a peguntarla por su vida amorosa y ella contestaba sin miedo a cada cosa que decia. Intentaba que ella admitiese solo una cosa, tan solo decir un si, para que todo fuera perfecto, pero las preguntas parecian no tener salida. Ella contaba experiencias que no ayudaban. Como una prueba de fuerza penso que podria acercarse y besarla, si ella accedia, podria ser cualquier cosa, solo ella llevaba una prenda. Se armo de valor y la beso. Ella no opuso resistencia. Sus labios tantas veces soniados estaban al fin en contacto con los suyos. Tras una leve resistencia, sus lenguas fogosas se movian libremente entre ambas bocas. Al final del trance beso con ternura su labio inferior esperando que ella decidiese que permitia hacer a aquella persona frente a si. - ...Por que?- murmuro ella sorprendida. -...podria decir ... que me he enamorado de ti... podria decir que eres hermosa, inteligente... bueno, que te quiero... Debio de sentirse halagada pues a eso solo contesto con un beso suave y lento. Sus cuerpos se juntaron. Sus manos acariciaban aquel pezon que se dejoentrever en la baniera. Le quito la camiseta y beso su cuello, mordio sus lobulos y jugueteo con sus orejeas. Acariciando aquellos pechos tantas veces soniado fue besando poco a poco su vientre llegando a sus caderas. Recorrio sus piernas besando cada recodo de su piel. Tanto tiempo deseandolo merecia todo el tiempo disponible. Sus finos muslos temblaban mientras acercaba su boca a la piel. Su pubis seguia humedo y su interior se mostro dek mismo modo al abrir las piernas de ella. Alli estaba el pequenio boton del placer, brillante, esperando el contacto. Lo beso con suavidad y ella gimio. Ella se hallaba sobre la cama con los ojos cerrados y mientras recorria sus labios menores con la lengua, arqueaba la espalda respirando profundamente. Excitando el clitoris con la lengua ella gemia y se movia pidiendo mas. Abarco con su boca toda esa flor sonrosada y pudo sentir aquel fluido calido saliendo de ella. Introdujo dos dedos en su interior, ella era tibia y en esos momentos resbaladiza. Comenzo a moverse dentro de ella mientras seguia lamiendo el clitoris. Ella se encogia y arqueaba la espalda al ritmo de los gemidos. Era feliz por darla placer, por hacerla sentirse bien. Cuanto mas se excitaba ella, mas se aplicaba a su sexo. Ella se encogio y gimio mas profundamente, pidiendo que parara. -No puedo mas. Ella recobraba la respiracion mientras todo volvia a la normalidad. El fluido se deslizaba por sus muslos. Se abrazaron entre el sudor y el cansancio. -Sabes como hacerlo eh? -Siendo una mujer, se como darle placer a alguien de mi mismo sexo. -Y que vamos a hacer ahora? _...abrazame... Se abrazaron y permanecieron abrazadas acariciandose suavemente, sin pensar en el mundo fuera de aquella habitacion, disfrutando tan solo el momento.

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